Por Héctor Gómez. A juicio del veterano jugador de 17 años de experiencia en la NBA, Al Horford, el Salón de la Fama es un privilegio y distinción en el cual ha pensado, a pesar de que su prioridad siempre ha sido tratar de impactar positivamente y contribuir a que su equipo alcance el nivel máximo de competitividad.
«Sí, claro, definitivamente, he pensado en eso. Ya en esta etapa de mi carrera uno empieza a pensar en esa posibilidad. Eso está ahí, todo el que me conoce sabe que lo mío no es por números, nunca he sido de ese tipo de jugador que está buscando alcanzar números», dijo.
Horford ofreció una entrevista exclusiva a Iván Ruiz y al Show del Mediodía que se transmite al mediodía por Color Visión.
En esa misma tesitura, añadió que «mi prioridad siempre ha sido traer un impacto positivo en el equipo de ayudar a ganar y si yo consigo méritos de números y cosas así en el proceso, está bien, pero para mi lo principal siempre ha sido tratar de ser el mejor jugador posible, de tratar de contribuir lo más que yo pueda a que mi equipo gane la mayor cantidad de juegos, pero si, ya en la temporada número 17 uno empieza a pensar en la posibilidad de ser eventualmente un miembro del Salón de la Fama, es algo que tengo en la mente y me llenaría de mucho orgullo si lo puedo lograr», manifestó Horford.
Es importante destacar que el Salón de la Fama de la NBA toma en cuenta, en adición al desempeño en la liga, el impacto que tuvo un determinado jugador, su comportamiento dentro y fuera de la cancha y su actuación en el baloncesto universitario.
Horford tuvo dos anillos de campeón de la nación en el baloncesto universitario con el conjunto de Florida Gators, ambos de manera consecutiva (2006 y 2007), dirigidos por el coach Billy Donovan.
De por vida, en 17 temporadas en la NBA, Horford promedia 13.1 puntos, 8.0 rebotes, 3.2 asistencias, 1.2 bloqueos y 0.8 robos. Su porcentaje desde la línea de tiros libres es de .760 y desde la línea de tres es de .379.
En términos absolutos, ha encestado 14,167 puntos, 8,574 rebotes, 3,501 asistencias, 1,249 tapones y 830 robos.
Su fe en Dios
“Mi prioridad en mi vida ha sido siempre darle la gloria a Dios, eso es lo primero para mi, Dios es mi norte; ya después de eso, todo lo otro sigue, viene entonces mi familia, mi responsabilidad en el deporte, mi responsabilidad con la comunidad. Dios siempre ha sido mi norte”, dijo firme y con mucho orgullo
La disciplina
Horford destacó el papel que juega la disciplina y el enfoque correcto en cualquier aspecto de la vida, máxime en los atletas de alta competición, en un mundo donde existen tantas distracciones.
«Jugar, ser atleta profesional no es nada fácil. Nosotros desde jovencitos estamos tratando de llegar a estos niveles, ya sea en el baloncesto, la pelota, etc., es difícil llegar y cuando lo logramos, mantenerse es más difícil”, dijo.
Al Horford es bien valorado en la NBA por su trayectoria decente y productiva.
Ante la pregunta de cuál entiende ha sido la clave de la gran temporada de los Celtics este año, Horford sostuvo que «sin dudas, pienso que la química que tenemos en el equipo ha sido la clave, así como también el enfoque que tenemos, estamos muy entregados a jugar en conjunto y los jugadores nuevos se han acoplado muy bien con nosotros los más veteranos», indicó.
Los Celtics, primer equipo en clasificar a los playoffs en esta temporada, y Horford ha tenido momentos claves en esos éxitos y está feliz de regresar a los playoffs.
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